El enfoque de muchas personas en las redes sociales quizás no es el más correcto (a mi parecer): muchos se centran en el algoritmo y no en su audiencia. Intentan adivinar qué tipo de contenido será «viral», persiguiendo tendencias que en unos meses pasarán de moda, sin pensar en si eso realmente representa su marca. Aunque esto puede ayudarnos a ganar un poco de visibilidad, soy fiel creyente de que este enfoque es insostenible y contraproducente a largo plazo.
El algoritmo es una herramienta, no el objetivo. Tu meta debe ser conectar de manera genuina con las personas. Cuando te enfocas en ofrecer valor real, construirás una comunidad leal que te seguirá sin importar los cambios del algoritmo.
La clave está en ser auténtico y transparente. Tu audiencia no busca perfección, busca una persona real con la que pueda identificarse. Busca ese no sé qué que tú tienes. No tengas miedo de mostrar tus vulnerabilidades, de contar tu historia y de compartir tus fracasos, no solo tus éxitos. Esta honestidad crea una conexión emocional que es mucho más poderosa que cualquier video viral.
Cuando las personas sienten que te conocen de verdad, es más probable que confíen en ti y en lo que ofreces, ya sea un producto, un servicio o simplemente tu conocimiento. Anímate a mostrarte tal cual eres y vence al algoritmo.
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